lunes, 7 de abril de 2014

Cerca y lejos

Estabas tan cerca de mi
pero no podía verte,
porque era necesario que sufriera:
desengaños, decepciones, llantos sin sentido,
malos tratos, malos ratos, malos tragos,
mil y una desilusiones.
Intentar conocer a un desconocido,
extraños que solo mostraban mentiras.
Estabas tan cerca de mi,
y te veia, pero no podía imaginar
construir algo juntos,
fui presa del temor y la cobardía,
no atiné a profundizar
en algo más que ser tu amiga.
Te miraba y no sabia que eres diferente,
que no eres como el resto,
que actúas de otra forma
distinta al común de los hombres.
Me mirabas distinto, me veias distinta,
y hoy me doy cuenta que tengo la llave
hacia el amor que tanto anhelo.
Hoy lo puedo soñar, y lo vislumbro
un amor ideal y sin palabras huecas,
una relación de madurez
y en la pasión que me despiertas cada dia.
El fuego me consume y soy cautiva
de lo que no imagine ni en mis sueños más descabellados,
una mujer en tus brazos totalmente entregada
y confiando en mi instinto y en el amor.

La Lluvia que quiero

Llueve otra vez, y yo feliz porque la siento, 
me da paz, alegría 
y aparece en mi corazón 
como un remanso. 
Aleja tristezas y renueva ilusiones, 
atrae el amor para disfrutarlo, 
te lleva a volar entre las sábanas, 
en sueños y en abrazos de pasión. 
Lluvia que me hiciste mal, 
pero te quiero en mi vida, 
para limpiar de energías de dolor mi aura, 
para llenarme de luz y de silencios, 
que no son totales cuando caes en los techos. 
Lluvia que haz de volver cuando lo quieras, 
que das y recibes la cosecha, 
que alimentas el espíritu vagabundo, 
lluvia que me gustas porque encierro 
en mis brazos ardientes el deseo 
de seguir a mi instinto y a mis sueños. 
Lluvia solo con vos estoy inspirada, 
a vivir y a sentir como el último día, 
cada instante de besos y de abrazos, 
cada momento de sol y de nubes errantes, 
que me llevan y me traen de la tierra al cielo.